En
uno de los últimos días en Sierra Nevada me encontré cenando en compañía de
gente muy interesante. Alberto me presentó 3 amigos entre los cuales Luis
Larramendi, hermano del mismísimo Ramón, todo un exponente de la exploración
polar (al que admiro y hice referencia en mi primero libro, 'Aventura ao Máximo')! Hablamos sin cansarnos de viajes y exploraciones y historia… Una noche perfecta. Ya en ese entonces me encontraba enamorado! Enamorado por los viajes, por algún escaso momento
de tranquilidad en el océano y, inesperada y irremediablemente, ... por una chica ‘muy tranquila’ de Sevilla!
Después de mucha nieve (Sierra Nevada esta petada) me toca mucho mar! Me
voy al mar en busca de momentos de tranquilidad (que me inspiren a terminar mi libro 'Ensayo sobre la soledad') y dejo en tierra una chica
tranquila que puede que inspirara toda mi vida!?! Qué raro, no? Puede que vaya con el corazón algo comprimido o puede
que esto resulte en una fuerza increíble para superar mi reto! Bueno, es que
ella aún no lo sabe! La que seguro me va a echar de menos, es una perra. Sini se llama: una
bodeguera-ratonera con la energía de un volcán activo - cuando me ve salta
sin parar como el perro de chocapic!
Anda
sevillana, dime una mentirita!
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